La música tiene un impacto significativo en nuestro bienestar emocional y nuestra salud mental. Escuchar música que nos gusta puede hacernos sentir felices, reducir el estrés y la ansiedad. Además, aprender a tocar un instrumento musical estimula el cerebro y mejora habilidades cognitivas. La música también puede ser una herramienta terapéutica efectiva en el tratamiento de trastornos mentales. En resumen, incorporar la música en nuestra vida diaria puede tener beneficios profundos para nuestro bienestar emocional y mental.